Una
mañana, sin saber cómo, te levantas totalmente desmotivado, sin ganas de hacer
nada y con la horrible sensación de que no puedes más. La idea de tener que
enfrentar otra jornada es tan extenuante que te agobia. Esta
sensación es bastante común y prácticamente todos, en algún momento de nuestras
vidas, la hemos experimentado ya que suele estar provocada por periodos de gran
estrés en los cuales hemos ido acumulando mucha “BASURA EMOCIONAL”.
La BASURA
EMOCIONAL, se va acumulando cuando no logramos deshacernos de los
resentimientos, la ira, el estrés y la frustración. Poco a poco, estos estados
crecen dentro de nosotros hasta llegar a ocupar un espacio enorme y un buen
día, sientes que estás repleto y que no tienes fuerzas para enfrentar los
nuevos desafíos.
Ten presente que aunque
la basura emocional no ocupa un espacio físico, al igual que sucede con la
basura de nuestra casa, si no nos encargamos de purgar cada día los estados
emocionales negativos, terminaremos llenos de insatisfacción y sin energía e
incluso nos expondremos a sufrir un colapso emocional, pero ¿Cómo librarnos de ella?;
A continuación les dejo 5 pautas para eliminar la basura emocional:
1. Reajusta las expectativas.
Las expectativas son nuestra mayor fuente de
insatisfacción. De hecho, casi nunca somos conscientes de ellas pero a menudo
esperamos demasiado de nosotros mismos y de los demás. Cuando nuestras
expectativas no se cumplen, nos sentimos mal y esto nos sume en un estado de
frustración que genera muchísima basura emocional. Por eso, el primer paso para
mantener limpia nuestra mente consiste en revalorar nuestras expectativas en
función de nuestros recursos actuales y, si es necesario, ajustarlas. Al
contextualizar tus expectativas puedes replantearte tus objetivos y llegar a tu
meta sin tanta presión.
2. Mantén una actitud positiva.
La mayoría de las personas son conscientes de la
importancia de enfrentar los problemas asumiendo una actitud positiva pero lo
cierto es que casi nadie lo hace. Una buena estrategia consiste en llevar un
diario de la positividad; es decir, al finalizar cada día, tendrás que escribir
al menos tres cosas positivas que te hayan ocurrido, por muy irrelevantes que
te parezcan. De esta forma irás creando el hábito de ver y darle importancia a
los aspectos positivos de las situaciones, lo cual te llenará de energía y te
dará fuerzas para enfrentar incluso las peores jornadas.
3. Sé proactivo.
No basta con mirar dentro de sí y darse cuenta de toda la
basura emocional que almacenamos porque esto solo nos hará sentir mal, es
imprescindible actuar. Recuerda que la introspección sin la acción puede llegar
a ser muy dañina porque nos sume en un círculo vicioso que conduce a la
lamentación. En vez de quedarte sentado viendo cómo la basura emocional se
amontona, ármate de valor y comienza a sacar poco a poco esos sentimientos
negativos que te impiden sentirte pleno. Por ejemplo, puedes ayudarte de un
especialista para que te ayude con el manejo de la ira, si este es tu principal
problema, o aprender técnicas
de relajación, si tu problema es la
ansiedad. Recuerda que no podrás eliminar toda la basura emocional de un
plumazo porque es probable que haya estado ahí durante meses o incluso años,
pero si das un paso tras otro, paulatinamente, lograrás limpiar tu mente.
4. Acepta y deja ir.
Una gran parte de la basura emocional que acumulamos
proviene de errores del pasado que no hemos aceptado y que continúan pesando en
nuestro presente. Cuando no logramos pasar la página, las experiencias pasadas
nos siguen dañando y, ante el menor estímulo, los sentimientos negativos
asociados a estas se vuelven a activar. Por ello, es fundamental mirar atrás y
liberarnos de las culpas, las recriminaciones y las frustraciones. De la misma
forma en que hacemos limpieza en casa, debemos hacer limpieza en nuestra mente.
Analiza las situaciones pasadas que te perturban, pregúntate si las emociones
que despiertan te reportan algo bueno y, si no es así, prepárate para dejar ir
esas sensaciones desagradables.
5. Sal de tu zona de confort.
Nuestra zona de confort es ese “lugar” en el que nos
sentimos cómodos y seguros porque tenemos el control de lo que sucede. Sin
embargo, para que las cosas sean diferentes hay que hacerlas de manera
diferente. No es suficiente con que limpies la basura emocional si continúas
con los viejos hábitos y vuelvas a llenarte de resentimiento. Salir de tu zona
de confort te ayudará a ver la vida desde otra perspectiva, te llenará de
buenas vibraciones y te dará la energía que necesitas para emprender nuevos
proyectos.
RECORDEMOS:
"Nuestras acciones son resultados de nuestro pensamiento, por lo tanto ser negativo, hará que tu vida, también sea así"
RECORDEMOS:
"Nuestras acciones son resultados de nuestro pensamiento, por lo tanto ser negativo, hará que tu vida, también sea así"