RECUERDEN LA BUENA EDUCACIÓN VIENE DE CASA...

Recordaba mi niñez y la forma cómo me educaron mis padres, que cuando mi madre me mandaba a comprar me decía, ¡lo primero, es lo primero!, ¡saluda!, saluda a tus mayores, no quiero que después me den quejas que no lo hiciste y siempre pide por favor, asimismo recuerdo que cuando tenía que sentarme a la mesa a recibir mis alimentos, tenía que lavarme las manos, no bostezar, estar con el rostro bien lavado y por supuesto con el cabello debidamente peinado, sentarme bien poniendo la mano encima de la mesa, por nada del mundo la mano tenía que estar debajo de la mesa, y no se me permitía por supuesto junto a mis hermanos hablar de accidentes, muertos, sangre, y si tenía que reír tenía que haber un motivo, pobre de mi si me reía sola, de algo pasado que había venido a mi memoria; eso molestaba mucho a mi madre, porque según ella era mala educación, y más aún si nos mirábamos con mis hermanos y nos daba el ataque de risa…

Asimismo me enseñaron, a ceder el asiento a mis mayores, a saludar a las autoridades, a no hablar mal de las personas, más aun si no están presentes para que puedan defenderse, ni hablar más de lo debido cuando una no sabía cómo se habían dado las cosas, de igual forma a no correr en la calle, ni llamar gritando a otra persona cuando esta ya se encontraba lejos, a no estar espiando a los vecinos ni a otras personas..

Me enseñaron a agradecer cuando recibía algún obsequio y a compartir, aunque sinceramente yo la veía cuadra cuando me decían invítale a tu primito o a tu amiguita, porque los manjares eran tan ricos que yo lo quería aprovechar solita, además cuando se es niño, resulta difícil dar de sí mismo, la inocencia de un niño, no ve en ese momento valores ni virtudes..

Posiblemente muchos de ustedes también recibieron una formación muy parecida, con una alta escala de valores en sus entornos familiares y que hasta el día de hoy no olvidan y lo ponen en práctica, pero actualmente un gran porcentaje de ésta buena educación que debe venir de casa se ha perdido; y los únicos responsables de tal atraso o retroceso social son los padres, quienes son los primeros educadores de sus hijos.

Los padres que trabajan en equipo y saben enseñar a sus hijos las reglas básicas de cortesía y urbanidad habrán asegurado el futuro de sus hijos ya que gracias a la buena educación que impartieron se les abrirá todas las puertas como respuesta natural a sus buenos modales, valores y cortesía.

Los padres que enseñaron a sus hijos a decir: buenos días, por favor, gracias, disculpas, te felicito, etc. habrán dado un hermoso paso en la formación de sus hijos.

En muchas ocasiones que he tenido de pasar por instituciones educativas y están saliendo de sus clases observo super apenada como salen vociferando palabras soeces, sin tener en cuenta que hay personas mayores y en algunos casos hasta los niños que los quedan mirando asombrados de las frases que salen de sus bocas, se insultan, jalan el cabello, dicen adjetivos como, habla maldito!, Oe basura!, estúpido, que te pasa porquería!, mongolo! y la mentada de madre a flor de labios de niños y jóvenes y otras tantas que no se pueden anotar aquí.

¿Yo me pregunto quién tiene la responsabilidad de todo ello?. .la mayor parte de ciudadanos dicen “ahora son muy malcriados los muchachos, y eso que estudian, en su colegio no les enseñan valores, con esos profesores borrachos que tienen,  que van a aprender", o sino "de qué barrio vendrán", cómo si la zona donde se vive marca la buena o mala educación.

Los valores se enseñan en el hogar y se refuerzan en la escuela, de ello no nos quepa la menor duda.

Bien claro está el significado de la palabra Malcriado: Es quién no tuvo una buena crianza y eso viene desde los primeros pasos, mejor dicho desde la primera infancia y la niñez.

Cuando los padres inician la crianza de un hijo su labor es de suma importancia ya que sus conductas se convierten en ejemplos a seguir; desde el momento mismo en que los padres conciben un hijo adquieren la responsabilidad de criarlo y de proporcionarle todo lo que él requiera, así como de formarlo, enseñarle valores y hacerle ver lo bueno y lo malo, lo que es conveniente y lo que no, lo que es correcto y lo incorrecto.

Luego el niño inicia su etapa escolar y la escuela se encarga de reforzar los valores aprendidos en casa.

Muchos padres piensan que esa formación en valores y esa enseñanza debe ser dada por la escuela. Sin embargo, si bien la escuela juega un papel importante no es ella la encargada de formar sino de reforzar.

¿Cuál es la solución que un país entero debe dar si ve que ésta situación va en aumento?

Pues habría que analizar que sucede alrededor de los niños y jóvenes de hoy, ven programas de televisión de espectáculos, farándulas, chismes y vulgaridades, leen diarios en su gran mayoría con jergas y expresiones soeces, tienen cómo ídolos a falsos líderes que no enseñan absolutamente nada.

Es importante agregar que debemos reconocer que también tenemos niños y jóvenes de primera categoría: saben saludar, pedir por favor, ayudan desinteresadamente, respetan a sus amigos con sus fortalezas y aspectos por corregir y siguen las indicaciones de sus padres y buena cultura familiar, pero el porcentaje de chicos con estas características es mínimo en relación a la mayoría.

Para solucionar ésta problemática social es necesario una amplia comunicación entre la escuela y el hogar, es fundamental una campaña de recuperación de la familia como eje fundamental del desarrollo integral de un país, y eso es labor de todos; fundamentalmente de todos los gestores del sector educación, gobernantes, empresas públicas y privadas, universidades y público en general.

Con una buena educación y una formación humanística, tecnológica y cultural tendremos asegurado una sociedad con un alto sentido de superación y cultura, donde cada vez habrá menos vulgaridad, insultos y agresiones y mucho aprecio y valor por la persona.

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¡La buena educación viene de casa...... no dejemos que se pierda!